La desesperanza aprendida, surge cuando a un chico le negás todo, cuando debe esforzarse demasiado para conseguir algo y prefiere después no hacer nada con tal de no conseguir aquello tan difícil. La desesperanza aprendida, es una educación mal estructurada, mal guiada, mal dirigida, donde lo único que se consigue es que la persona no avance.
¿Es la educación de hoy diferente? ¿Acaso se consigue algo mejor hoy que ayer? Hoy se aprende de forma positiva, hoy los chicos son más acertivos y osados, tienen empeño por la rebeldía porque está en el ambiente, porque se permite, porque si no sos rebelde, no conseguís tu objetivo. Tal vez hoy la deseseperanza aprendida, no sea un estilo de vida, sino un error superado. Sin embargo los adultos de 40 y más, fueron enseñados con la forma desilusionante que se usaba antes. Antes se pensaba, que si se esforzaba mucho la persona, valoraría lo que se le daba, y como cada persona es diferente, no con todas funcionaba. La deseperanza aprendida, es el resultado de una educación dura, y era un común denominador, que en algunas personas funcionaba para despertar su rebeldía, su empuje, su deseo de superar ese obstáculo, porque ése era su tipo humano. El tipo humano también se estimula de manera diferente. La desesperanza aprendida, veo que es como una plaga que ha cubierto, que ha hendido los mercados de gente insatisfecha, que no tiene la certeza de hacer bien las cosas, que no se atreve a equivocarse, so peligro de que le den un reglazo, una mala cara, un castigo. La desesperanza aprendida, amenaza todos los corazones emprendedores, porque no tienen la voluntad de sobreponerse al fracaso. Ellos son los que más se han beneficiado con las nuevas formas de enseñanza y aprendizaje de "vivir positivo".
Aquellos, cuyo carácter férreo estimuló el estilo castigador, amenazante y exigente de antaño, son hoy grandes empresarios y gente que domina las cúpulas empresariales de todo el mundo. Ellos han podido vivir y disfrutar de la belleza que trae la exigencia y la disciplina militar. Ellos que sobreponiéndose a la dureza de una educación por demás estricta, son hoy personas impresionantes, admirables. Son personas en verdad inteligentes que mueven al mundo de una forma que me fascina. Me fascina cómo son genios, creativos; cómo llevan a cabo sus ideas y las logran materializar, cómo pueden dar órdenes y revisar que se cumplan, y tener a su cargo muchas personas; que pueden mover empresas grandes y manejarlas en los diferentes niveles que una empresa importante requiere.
Éllos, que sobreponiéndose a una dura disciplina militar, supieron rebelarse y encontrar el camino correcto para ser hoy gentes que mueven al mundo. Creo que se han convertido o han hecho al mundo un poco material, porque la dureza con que fueron enseñados, les hizo matar los sentimientos de la bondad, la benevolencia, la humildad y todos aquellos sentimientos que hacen del mundo algo justo, un lugar hermosos para vivir lleno de pájaros y campos soleados. Me parece que ellos han tornado al mundo en uno práctico, sin yuyos, sin verde y sin sol, porque es lo que su estilo militarizado ha conseguido. Sin embargo, pese a ellos y a su mundo material gris, yo los admiro, porque han podido superar todas las tristezas que implica la dureza de una educación militar.
Viendo la cara opuesta de la moneda ¿Qué hay de aquellos que no han podido superar esa educación férrea, dura? Son aquellos que viven la desesperanza aprendida. Van por el mundo gris, sufriendo el recuerdo de aquel maltrato y aquella dureza. Van dudando cada paso que dar, porque no están seguros si ese paso sea el correcto, o deberán comenzar los deberes nuevamente y recomenzar todo de nuevo. Son esas personas que han descubierto atajos de corrupción, atajos que han encontrado útiles para superar esas dureza, esa deseperanza aprendida que los ha llevado a no ser los dueños del mundo, a sentir gran envidia de aquellos que si lo son. En su forma de sobrevivientes, pienso que están los segundos en el escalafón del mundo presente. Ellos consiguen lo mismo que los dueños del mundo, pero con trampas, con coimas, con malos pensamientos. Son como el demonio del mundo. Son el hermano molesto del rey león. Mientras el Rey León era justo y admirado, su hermano era tramposo y envidioso, era admirado por el bajo mundo y alabado por él, alabado por las hienas y loos zopilotes carroñeros.. Estas segundas personas que supieron acomodar su personalidad a la dureza no superada de su educación, son quienes nos provocan dolores de cabeza. Son ellos los que aprenden y muestran el camino fácil, del dinero fácil y sucio. Son ellos los que ponen de cabeza a los gobiernos quienes quieren enderezar al país, o abusar de él, y son ellos, los que con sus trampas, le provocan dolores de cabeza a los presidentes, gobernadores y regidores. Son ellos los que vengan a toda la población de los abusos de los gobernantes.
Son ellos los que admiramos los de más abajo, porque los vemos igual que nosotros, pero con un poco de astucia. Los dueños del mundo estan muy arriba, pero los de abajo están más cerca, son más sencillos de emular y alcanzar.
La deseseranza aprendida ha inculcado en la gente normal, sensible, que no le gusta el mundo material, la duda y el consistente fracaso. El totro grupo que resulto de esta dureza de educación, ha formado gentes espirituales, que no les importa el dinero ni la opulencia material, porque la deseperanza aprendida, les ha puesto el obstáculo para llegar a él, y ellos a su vez, se ha convertido en la parte soñadora de la sociedad, en la parte positiva, que formula las reglas y los cambios sutiles para formar una sociedad más justa. Una sociedad que acepte a todos aunque no tengan millones en el banco, sean dueños del mundo o corruptos, son ellos losque humanizan al mundo, los que se atreven a sembrar una plantita, sabiendo que el medio la ahogará, pero uq se arriesgan, pese a la inminente sedesaarición de ésta. Aquellos espirituales, o inmateriales que no supieron superar la educación dura, son ahora, los simples, los que le dan vida y sentido al camino, los que uno se encuentra por la calle, y les saca una sonrisa. Aquellos que mueven a pensar si lo que se hace es correcto o no, si lo qque se realiza día a día es bueno para la persona o es solo vanal, e implica gasto material innecesario.
La deseperanza aprendida ha lastimado mucho al mundo, porque hay mucha gente que pudo tomar mejores decisiones, si hubiera tenido la certeza y la seguridad de que se vale equivocarse, de que siempre hau otros caminos que ayudan a llegar al mismo lugar. La desesperanza aprendida ha convertido a mucha gente en personas desilusionadas, que no tiene voluntad de subir, porque no saben si allí donde llegarán, será el lugar correcto. Tiuene tantos problemas que hoy ha presentado nuevos retos para comprender por qué no todos han tenido éxito y para elaborar otras formas de enseñanza, que ayuden al mundo a ser un lugar más habitable, en donónde los que no soportan la dureza militar, puedan vivir felices con la certeza de que su vida tiene un sentido, de que su mundo y su forma de ser le da un valor y forma parte de un todo. Que equiilibra la balanza para que auello que han aprendido no sea un constante sufrimiento y quejarse sobre lo que no pudieron lograr como los dueños del mundo.
¿Es la educación de hoy diferente? ¿Acaso se consigue algo mejor hoy que ayer? Hoy se aprende de forma positiva, hoy los chicos son más acertivos y osados, tienen empeño por la rebeldía porque está en el ambiente, porque se permite, porque si no sos rebelde, no conseguís tu objetivo. Tal vez hoy la deseseperanza aprendida, no sea un estilo de vida, sino un error superado. Sin embargo los adultos de 40 y más, fueron enseñados con la forma desilusionante que se usaba antes. Antes se pensaba, que si se esforzaba mucho la persona, valoraría lo que se le daba, y como cada persona es diferente, no con todas funcionaba. La deseperanza aprendida, es el resultado de una educación dura, y era un común denominador, que en algunas personas funcionaba para despertar su rebeldía, su empuje, su deseo de superar ese obstáculo, porque ése era su tipo humano. El tipo humano también se estimula de manera diferente. La desesperanza aprendida, veo que es como una plaga que ha cubierto, que ha hendido los mercados de gente insatisfecha, que no tiene la certeza de hacer bien las cosas, que no se atreve a equivocarse, so peligro de que le den un reglazo, una mala cara, un castigo. La desesperanza aprendida, amenaza todos los corazones emprendedores, porque no tienen la voluntad de sobreponerse al fracaso. Ellos son los que más se han beneficiado con las nuevas formas de enseñanza y aprendizaje de "vivir positivo".
Aquellos, cuyo carácter férreo estimuló el estilo castigador, amenazante y exigente de antaño, son hoy grandes empresarios y gente que domina las cúpulas empresariales de todo el mundo. Ellos han podido vivir y disfrutar de la belleza que trae la exigencia y la disciplina militar. Ellos que sobreponiéndose a la dureza de una educación por demás estricta, son hoy personas impresionantes, admirables. Son personas en verdad inteligentes que mueven al mundo de una forma que me fascina. Me fascina cómo son genios, creativos; cómo llevan a cabo sus ideas y las logran materializar, cómo pueden dar órdenes y revisar que se cumplan, y tener a su cargo muchas personas; que pueden mover empresas grandes y manejarlas en los diferentes niveles que una empresa importante requiere.
Éllos, que sobreponiéndose a una dura disciplina militar, supieron rebelarse y encontrar el camino correcto para ser hoy gentes que mueven al mundo. Creo que se han convertido o han hecho al mundo un poco material, porque la dureza con que fueron enseñados, les hizo matar los sentimientos de la bondad, la benevolencia, la humildad y todos aquellos sentimientos que hacen del mundo algo justo, un lugar hermosos para vivir lleno de pájaros y campos soleados. Me parece que ellos han tornado al mundo en uno práctico, sin yuyos, sin verde y sin sol, porque es lo que su estilo militarizado ha conseguido. Sin embargo, pese a ellos y a su mundo material gris, yo los admiro, porque han podido superar todas las tristezas que implica la dureza de una educación militar.
Viendo la cara opuesta de la moneda ¿Qué hay de aquellos que no han podido superar esa educación férrea, dura? Son aquellos que viven la desesperanza aprendida. Van por el mundo gris, sufriendo el recuerdo de aquel maltrato y aquella dureza. Van dudando cada paso que dar, porque no están seguros si ese paso sea el correcto, o deberán comenzar los deberes nuevamente y recomenzar todo de nuevo. Son esas personas que han descubierto atajos de corrupción, atajos que han encontrado útiles para superar esas dureza, esa deseperanza aprendida que los ha llevado a no ser los dueños del mundo, a sentir gran envidia de aquellos que si lo son. En su forma de sobrevivientes, pienso que están los segundos en el escalafón del mundo presente. Ellos consiguen lo mismo que los dueños del mundo, pero con trampas, con coimas, con malos pensamientos. Son como el demonio del mundo. Son el hermano molesto del rey león. Mientras el Rey León era justo y admirado, su hermano era tramposo y envidioso, era admirado por el bajo mundo y alabado por él, alabado por las hienas y loos zopilotes carroñeros.. Estas segundas personas que supieron acomodar su personalidad a la dureza no superada de su educación, son quienes nos provocan dolores de cabeza. Son ellos los que aprenden y muestran el camino fácil, del dinero fácil y sucio. Son ellos los que ponen de cabeza a los gobiernos quienes quieren enderezar al país, o abusar de él, y son ellos, los que con sus trampas, le provocan dolores de cabeza a los presidentes, gobernadores y regidores. Son ellos los que vengan a toda la población de los abusos de los gobernantes.
Son ellos los que admiramos los de más abajo, porque los vemos igual que nosotros, pero con un poco de astucia. Los dueños del mundo estan muy arriba, pero los de abajo están más cerca, son más sencillos de emular y alcanzar.
La deseseranza aprendida ha inculcado en la gente normal, sensible, que no le gusta el mundo material, la duda y el consistente fracaso. El totro grupo que resulto de esta dureza de educación, ha formado gentes espirituales, que no les importa el dinero ni la opulencia material, porque la deseperanza aprendida, les ha puesto el obstáculo para llegar a él, y ellos a su vez, se ha convertido en la parte soñadora de la sociedad, en la parte positiva, que formula las reglas y los cambios sutiles para formar una sociedad más justa. Una sociedad que acepte a todos aunque no tengan millones en el banco, sean dueños del mundo o corruptos, son ellos losque humanizan al mundo, los que se atreven a sembrar una plantita, sabiendo que el medio la ahogará, pero uq se arriesgan, pese a la inminente sedesaarición de ésta. Aquellos espirituales, o inmateriales que no supieron superar la educación dura, son ahora, los simples, los que le dan vida y sentido al camino, los que uno se encuentra por la calle, y les saca una sonrisa. Aquellos que mueven a pensar si lo que se hace es correcto o no, si lo qque se realiza día a día es bueno para la persona o es solo vanal, e implica gasto material innecesario.
La deseperanza aprendida ha lastimado mucho al mundo, porque hay mucha gente que pudo tomar mejores decisiones, si hubiera tenido la certeza y la seguridad de que se vale equivocarse, de que siempre hau otros caminos que ayudan a llegar al mismo lugar. La desesperanza aprendida ha convertido a mucha gente en personas desilusionadas, que no tiene voluntad de subir, porque no saben si allí donde llegarán, será el lugar correcto. Tiuene tantos problemas que hoy ha presentado nuevos retos para comprender por qué no todos han tenido éxito y para elaborar otras formas de enseñanza, que ayuden al mundo a ser un lugar más habitable, en donónde los que no soportan la dureza militar, puedan vivir felices con la certeza de que su vida tiene un sentido, de que su mundo y su forma de ser le da un valor y forma parte de un todo. Que equiilibra la balanza para que auello que han aprendido no sea un constante sufrimiento y quejarse sobre lo que no pudieron lograr como los dueños del mundo.
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