No comprendo por qué siempre es lo mismo con este señor. ¿Por qué se tiene que ir a otro país y no a su casa? Será el dinero? Será que otro continente y las ofertas que pudiera tener son más económicas? Será que quiere aprovechar y hacer algo que nunca mas hará? No comprendo por qué después de 6 meses de ausencia y de estar lejos de su familia no quiere regresar con ellos. No me da sentido. Tal vez ya se sienta ajeno a s propia familia tras viiajar tantos meses, pero no comprendo. Cada cabeza es un mundo y como tal cada quien actúa de acuerdo a lo que cree es lo mejor. Para mi lo mejor siempre será mi familia. Mi familia es quien me hace ser, quien es mi misión y para quien vivo. No me imagino viviendo en otro lado. No comprendo. en fin ya comprenderé al final de la lección.
El día que pintaba bastante malo, terminó maravilloso. Empezaba triste y confuso, lleno de ideas desagradables. Me quedé clavada antier con los refugiados, los trabajé durante el día, pero algo me hará quedado. Tal vez pensé en el clavo, pero yo me estoy enganchando sin ver resultados y he decidido alejarme. Me vestí linda un vestido mmorado con sandalias, y eso me hizo sentir bien. Luego varios proyecto que charlar, y después llevar a cabo. Un corte de pelo que terminó bastante bien, pero que me llev´ó a ccomprender que nunca un corte resuelvve los errores del pelo, esos siempre harán que se lleve un tipo de peinado. Luego caerme a media calle y que casi me atropellen. Yo peleaba con el pequeño que ya está mmuy fuerte, llevaba tacos y perdí el equilibrio. Un auto venía y afortunadamente se detuvo porque yo cuan larga soy caí al piso. Me torcí el tobillo y caí en cámara lenta. Despu¡és el chico decía -"casi me atropellan" yo tan asustada subí al auto, quedé nerviosísima y con la duda sobre qué hacer con esta situación, como resolveré cada vez que quiera salir con este pequeño.
Estuve un rato muy nerviosa en el cafetín con los chicos hasta que me calmara. El resultado, no poder caminar bien y ir renqueando. No fue nada grave, afortunadamente no me raspé nada ni la cara ni las piernas, pero si fue muy desagradable el susto.
Del segudo proyecto no estoy muy convencida, la casa quedaría con una vista diferente y el cuarto tipo invernadero, quedaría con menos luz. No digamos el gasto excesivo que una remodelación implica. Tanto viví el proyecto que en la noche ya sentía que estaba realizado, tras cambiarse de cuartos, muebles y meses después. Así lo sentía yo, como que ya lo hubiera hecho y estaba tan cansada que me dormí muy temprano.
El proyecto de las clases de cocina me agrada, me ayudará a la introspección y a estar acompañada, a vivir con tanta gente en un plan divertido. Creo que hablé de mas con mi amiga. Creo que di demasiada información inútil. Me salí del tema y no me comprendió. Lo bueno es que me contó un tema muy interesante. Una joven amigo suyo ve almas en pena. Había una mujer que se le subía al auto siempre al pasar frente a una iglesia, por supuesto que ya no pasaba por allí. entonces fue con un sacerdote y le pidió ayuda, éste le dijo que charlara con ellos y les preguntara que les passaba y que podía hacer por ellos. El joven tiene como 27 años, y supongo que ya se aostumbró y ya sabe lidar con ellos, pero me imagino que en el proceso, madre he hijo un gran susto. Como es increíble encontrarse con gente que siempre tiene un tema de conversación, quien siempre es una estación. Cuando estoy con ella, en verdad que la pasamos bien y charlamos como si nos hubiéramos visto ayer y todos los días. Es tan abierta y tan simpática que rápidamente nos ponemos al día. Es un placer encontrar gente así en la vida, con la que poder charlar y comentar de todo y nada, de nuesstros proyectos y resultados. Es curioso inclusive que al cambiar de lugares cambiara también el estilo de la charla.
Me duele el corazón y mi respiración está pausada, hay algo que no puedo resolver y a lo que le sigo dando vueltas. ¿Por qué la gente no busca un puerto donde anclar sus penas? El vivir en el extranjero te vuelve sensible y predispuesta a vivir las cosas de una forma diferente, cansa inventar cada día y a veces es buena idea tocar puerto, en las cosas que conoces, en lo que te es familiar para poder seguir adelante. Es importante saber que uno tiene cosas a las que asirse para recuperar fuerzas. Un niño que vive con su familia recibe la seguridad de adulto para andar el camino. Cuando el camino ya no tiene sentido puede regresar a sus orígenes, puede recordar sus elementos infantiles, tocar la casa donde vivió, mirar las fotos o charlar con los hermanos para tocar base, para recuperar la fuerza que la vida necesita darte, si no lo haces de esta forma, cada día se hace mas difícil. Es importante de repente irse a casa, aunque esto implique perder tiempo, porque es como afilar el hacha. "Cuenta la historia de un leñador que cortaba muy bien y muy rápido los árboles. En su primer día de trabajo cortó 11 arboles, el segundo 15 el tercero 18 y estaba muy orgulloso de su proeza. sin embargo la siguientte semana empezó a bajar su nivel y en vez de 19 cortó 17, así iba bajando cada día hasta que tras un mes de trabajo terminó cortando solo 3. Va con el capataz y le comenta su preocupación y su ineficiencia, a lo que el capataz le responde -"te has detenido a afilar el hacha?" Afilar el hacha es tomar vacaciones, ir con los orígenes, hacer lo que hiciste que te diera seguridad, para así seguir el camino en tu máximo potencial tras un merecido descanso.
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