Cuando ya no esté a tu lado, cuando estemos lejos tu sabrás donde encontrarme
No me busques en el paisaje, porque allí no estaré
tampoco en la calle porque hay demasiadas y nos cruzaremos en un desencuentro
No me busques en la casa, porque entre puertas y ventanas ya me habré salido.
Búscame en tu corazón, búscame en tu centro
allí es donde yo habito. Allí me encontrarás todo el tiempo que necesites
y en el momento que lo requieras.
En tu corazón está mi casa. En ese lugar tengo mi guarida, tengo mi calor
en tu corazón vive un pedazo de mi.
Tu eres mío, por eso es allí donde siempre me encontrarás.
Búscame siempre, búscame cuando estés feliz
búscame para contarme tus logros y también tus desventuras
pero recuerda que en mi no puedes depositar tu amargura.
tu amargura debe irse lejos de nosotros, ella nos entristece el alma,
nos pone a llorar, nos llena de ansiedad y nos quita las buenas vibras.
Tu amargura alejala también de ti, porque a ti te hace daño, pero no
me la mandes a mi, yo tengo mis propias tristezas y no puedo cargar
la tuya y la mía.
Buscame con frecuencia, con el afán de saber más de mi
yo siempre te estaré esperando, tu y yo todo el tiempo
en el tiempo perdidos, tu y yo conectados en el corazón
tu y yo como el primer día que nos encontramos. Te quiero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario