7.1 CUANDO LA ASERTIVIDAD TE DA SEGURIDAD PARA ACTUAR
Esta mañana hay gran movimiento en la oficina, Ray nervioso sube y baja por los diferentes pisos, parece que algo no le está funcionando, o que necesita encontrar algo. En uno de sus viajes se encuentra acompañado por una cara desconocida, pero a la vez conocida. Lo saluda en español para sacarse de la duda, y resulta que no es de la oficina, es extranjero.
Oh, claro, su nombre no lo tengo presente, pero lo he visto en fotos en la página de la compañía.
¿Cómo dices? ¿Has visto mi foto en el comunicado interno? Soy Greg Harris, de la filial de Panamá.
Claro. Ya lo recuerdo, yo estoy preparando un proyecto para esa filial Y me parece recordar su foto en el organigrama. - dice Ray sonriente al hallar a ese señor tan inesperadamente, y se apresura a presentarse - Soy Ray Vilchis.
Mucho gusto, ya nos veremos. Me agrada tu actitud, - dice el hombre del elevador con propiedad. Ray se despide fascinado, nunca hubiera pensado conocer a su futuro jefe en semejante circunstancia.
Hace la presentación ante un Greg Harris, el jefe de la filial de Panamá, quien sonriente escucha atento la presentación de este joven y le gusta su estilo.
Ray me gustaría platicar contigo, me parece que está perspectiva que usas se podría aplicar en el plan de trabajo que nosotros tenemos. -Dirigiéndose al jefe- No sé si pudiéramos compartir este talento.
Por supuesto que sí, Greg, - dice el jefe de Ray, quien también está atónito al comparar al Ray tímido de unos meses atrás y al que tiene enfrente, no se parecen nada. A Ray la asertividad le ha dado el aplomo y la capacidad de salir avante ante cualquier percance.
Así platican ambos jefes, acerca de Ray
Oye, - se adelanta el representante de Panamá, - este joven Ray, me ha caído muy bien, me parece que tiene una forma muy acertada de captar la atención y la presentación de su tema es lo que necesitamos, podríamos aplicar los principios de intercambio interno para que lo probemos por un tiempo.
No sabes el gusto que me da que hayas puesto los ojos en él - exclama congratulante el jefe de Ray - es un caso impresionante lo que se ha suscitado en este joven. Te puedo decir que él mejor que nadie merece ser promovido. Ha cambiado mucho en poco tiempo, creo que va a ser bueno para él.
De esta forma, Ray consigue la ventaja que trae la asertividad, la de encontrar las oportunidades, y con certeza saberlas aplicar.
Está contento en la reciente asignación, con la emoción que produce la novedad, quiere poner manos a la obra con cierto trabajo. Ve que se le dificulta poner velocidad, y al dar la vuelta por los compañeros busca un equipo. Todos, unos más que otros, están enganchado en el internet pero consigue abrirse un lugar con una joven.
Hola, soy Ray- se presenta directo con su hermosos ojos y su actitud interesante con aplomo en la cara.
Ella se extraña, no es lo más común que un recién ingresado se presente así solo. Mediante pasa el tiempo y la charla, a ella le agrada Ray. En este tiempo él le cuenta de su forma de trabajar en equipo, resaltando cualidades de cada uno para salir adelante en algún trabajo.
Es buena tu idea, pero aquí cada quien resuelve solo sus problemas- dice ella seriamente con una personalidad agresiva. Ray la reblandece y domina como lo hiciera con Constanza, observa sus brazos cruzados y que pone su mano en la boca antes de hablar.
Me parece que tienes dudas sobre mi- pregunta Ray al evaluar la comunicación no verbal de la chica.
Así es, no acostumbro charlar con los de la oficina. - responde ella altanera regresando los ojos a su silla..
¿Te sientes insegura?
No, es sólo que no te conozco.
Comprendo tus temores, y créeme que tampoco soy mala persona, es que sólo me interesa resaltar nuestras cualidades para sacar el trabajo. Es más divertido trabajando en equipo.
Como te decía, eso no se acostumbra aquí, - le repite la chica.
De donde yo vengo tampoco, pero yo veo que eres buena escribiendo, yo soy bueno con gráficas...
Es que no quiero que mires mi trabajo - dice ella recelosa.
Veo que necesitas discreción, a mí no me molesta que mires. ¿Crees que podamos resolver este misterio? - pregunta Ray intentando romper el hielo de esta joven cerrada a cualquier intento de Ray para acercarse. Sin embargo, con frases empáticas, ella va cediendo su agresividad.
Creo que eres muy simpático Ray, yo creo que podremos trabajar juntos.
Para este momento, ya hay varios jóvenes acercándose a estos dos, que charlan de trabajo; sin embargo esta joven llamada Almudena tiene un admirador, que empieza a mirar a Ray con malos ojos.
Esa idea tuya es malísima - se enfrenta el joven admirador de Almudena.
Hola ¿Cómo estás? Soy Ray, ¿Cuál es tu nombre?- lo mira Ray intentando disimular el susto que le ha dado encontrar de pronto tal barrera. Él ha encontrado la asertividad, pero es tímido de carácter.
Me llamo Luis Cabrera - responde el joven sin notar la timidez de Ray.
Bueno, cuando deseen ayuda en gráficas y finanzas me pongo a sus órdenes- se salva Ray viendo que necesita buscar alguna herramienta asertiva con la que enfrentar a este joven agresivo.
Luis Cabrera pone muchas trabas a Ray, a lo largo de su estancia: no le permite crecer, ni hacer su meta, está celoso de que su chica esté mirando a otro joven que no sea él. Él es agresivo con la característica despreciativa. No es capaz de aceptar que un joven de otro lado, venga a imponerse.
¿Por qué pretendes venir a cambiar nuestra forma de trabajar, como si tu oficina fuera mejor?
Ya con seguridad, Ray toma la técnica de valoración de los sentimientos.
Me impresiona la visión que tienes de mi capacidad- se defiende Ray.
Ah... -sorprendido Luis contesta sin esperar el halago de Ray, -¡Sí, yo soy el líder aquí y veo y comprendo mejor que tú! -
Mira nosotros, Patricia y yo, en mi oficina acostumbrábamos a trabajar en equipo, cada quien aportaba a un trabajo y salía mejor que si lo hiciera uno solo, - explica Ray abierto contando la forma en que él apoyado por Patricia pudo resolver algunos problemas.
Te felicito por tu éxito con tu amiga, pero te repito, aquí funcionamos diferente.
¿Sientes que estoy invadiendo tu espacio? - pregunta Ray al ver que Luis Cabrera no se ha puesto en sus zapatos.
Así es - se defiende Luis Cabrera. Nuevamente explicando los sentimientos del joven, Ray consigue que él ceda. Le siembra la curiosidad de que tal vez exista otra forma de trabajar y accede a funcionar en equipo.
Así Ray siguiendo las pautas de intervención correcta, consigue integrarse en su nueva asignación.
Fin.