viernes, 22 de septiembre de 2017

TERREMOTO EN MÉXICO, 19.9.17

Una semana después del terremoto, los vecinos regresaron a sus actividades, pero las unidades especializadas apuntalan las lozas, para poder encontrar personas, o sus restos. 



TERREMOTO EN MÉXICO

LOS POLÍTICOS Y GOBERNANTES. UN  TERREMOTO  PEOR 

Día uno
Son las 13 horas estamos en la casa cuando de pronto se escucha un camión que pasa dejando la casa vibrando, pero esta vibración se convierte en un tren que pasa por las escaleras, y nos percatamos que ¡esta temblando!. Corremos al jardín, y desde allí miramos  la casa moverse. Esperamos y esperamos a que pase el temblor, Parece una eternidad y así allí nos quedamos un buen rato. entonces la curiosidad de saber de cuanto ha sido su magnitud me mueve. No hay luz. No puedo escuchar la radio, ni llamar por teléfono, es entonces cuando voy a buscar el radio de emergencias. Sólo se escucha una estación. Relata lo que el helicóptero mira. Curiosamente unas horas antes habíamos hecho un simulacro parte de éste, es poner en el aire helicópteros. Por eso razón a los 10 minutos después de finalizado el terremoto, ya nos relataban de la escuela, de todos los edificios caídos, de la colonia roma, condesa que en el terremoto del 85 sufrieron mucho, la mayoría de los edificios caídos entonces, eran de esa zona.  No comprendo qué tiene ese terreno que atrae la destrucción. 

Día dos
Tras revisar todo lo que había sucedió ayer opté por ir a una universidad cercana para ayudar, pero de paso quería llevar algunas herramientas de rescate. El tráfico era imposible, extraño para la hora, en general el tráfico camina, pero aquí era un estacionamiento inmenso. Tras perder 30 minutos parada decidí llegar a la universidad para ayudar, pero el tráfico me lo impidió. Decido ir a otra, y el tráfico me lo impide nuevamente. Frustrada, me regreso a la casa, algo me dice que mi trabajo no es entre la gente, en un centro de acopio, pero no lo veo claro. 

Día tres
Amanezco cansada, incapaz de moverme, tras la frustración del día anterior de no poder ir a ningun centro de ayuda, ni con ninguna persona, todo en mi soledad miro la TV Y SIGO ALGUNAS EMISIONES QUE REPORTAN EL TEMBLOR. 

Erik 
La historia es un edificio en una esquina en la colonia Condesa: a los 50 minutos de pasado el terremoto está Erick con otras 5 personas reunido en una sala de juntas, sin previo aviso se desploma el edificio. Ya no había peligro de terremoto, ni tampoco alarma sísmica, sólo una estructura, que debilitada se viene abajo. 4 personas logran salir, a la 5a la rescatan en poco tiemo, parece que estaba cerca de la salida, pero y Erick? ¿Por qué Erick no estaba con sus compañeros? En una escena presentan una mujer que con un megáfono le habla a su hermano, “aquí te espero a que salgas, tus hijos, hermanos y padres están bien, y yo estoy aqui esperándote a que salgas”. en otra escena pasan al binomio canino que entre los escombros elige un rincón con una manguera anaranjada expuesta, aparentemente su olfato ha detectado un ser vivo debajo de todos esos escombros en ese rincón preciso.  Pasan horas y horas, pasa todo el día y espero con tensión a que avence la búsqueda, espero a que al igual que en otras emisiones, por algún orificio, salga Erick sano y salvo, así como otras personas que han sido salvadas de otros edificios. Pasan las horas y nada, no se sabe nada de Erick. Por la noche, una imagen en la que el mismo espacio con la manguera naranja expuesta llega el binomio canino a revisar, y se aleja del lugar, no hay señales de Erick. En la madrugada, el cuerpo de Erick es hallado sin vida entre los escombros. Aparentemente Erick regresó por algo que lo retrasó, que lo mantuvo encerrado en esa oficina, un espacio demasiado profundo, o alejado del punto de salida, tal vez encontró un triángulo de vida tal vez le cayó algo que le impidió moverse con presteza, sólo sobrevivó 48  horas. ¡Cómo me pudo perder a Erick! Yo no lo conozco, nunca lo había visto, pero la imagen de una sola vida que no fue salvada me entristeció demasiado, Erick, al igual que mucho otros que no fue salvado, se quedó con mi tristeza. Por eso escribo eso tan triste porque mi mente se quedó esperando a que Erick saliera con vida, un padre de familia, un hombre importante que dirigía una junta. No he seguido la transmisión para saber por qué Erick no llegó a la salida, pero su ausaencia me duele y me ha pegado. 

Más tarde leo en las redes sociales que todo lo que la gente ha recolectado para los pueblos de otras ciudades, se lo están quedando las bodegas del gobierno. El DIF que está a cargo de los niños sin familia, el partido gobernante pegando sus emblemas y sus cajas en esos víveres que el pueblo ha recolectado para los hermanos en necesidad, es el gobierno quien se alza el cuello para donarlo como ayuda a los damnificados. En un año será campaña por presidente y esas despensas que han robado de los damnificados serán transformadas en donativo del gobierno para esas personas necesitadas. Esa impotencia de no poder delatar a quien a luz del día te está robando, ese sentimiento de que el gobierno siempre hace sus trampas para engañar a los ciudadanos. Ellos podrían también hacer algo como donar ladrillos y cemento o materiales de construcción para las casas de esa gente, ellos pueden ayudar diferente, pero no, tiene que usar aquello que los ciudadanos han donado para los que están en necesidad. 

Es demasiado triste la impotencia que uno como ser humano tiene. No es suficiente orar cada hora por cada persona que se encuentra en necesidad, por la familia de Erick y por los familiares de tantos otros que se quedaron enterrados en los escombros del dolor. No es suficiente la oración para parar la injusticia de los gobiernos, la prepotencia de que los ciudadanos son sujetos, las oraciones a Dios, no detienen al presidente y sus secretarías de robarse lo que es para los necesitados. 

Las oraciones no alcanzan para hacer ver a los políticos que deben entender que también son ciudadanos, que si bien ellos no perdieron su casa ni su familia, podrían ponerse como ciudadanos a repartir despensas, a hacer llegar a los más necesitados todo aquello que los otros ciudadanos han recolectado. Ellos los políticos, son una clase aparte, una clase que roba, que se aprovecha, que en vez de sentir algo especial y tomar la oportunidad de reivindicarse con los gobernados, prefiere permanecer como los Ladrones de cuello blanco que siempre han sido. prefieren permanecer siendo Ladrones que roban a los ciudadanos, a los necesitados para que ellos más tarde queden bien. ya no entregarán lo que los damnificados necesitan hoy y necesitarán mañana. Ellos entregan miseria, lo que a su parecer merecen los damnificados, para que después en las épocas electorales, den a cambio de un voto a la gente que no lo necesita, todo lo que los ciudadanos han recolectado para sus hermanos. 


Tanta impotencia me tiene triste, me tiene enferma, desanimada. ¿Por qué una oración no es la magia que muestre que todos estamos en el mismo barco? ¿De qué sirven las oraciones que he hecho desde mi trinchera, si el resultado es sólo comprobar que el mundo no cambia? Una oración puede cambiar a los ciudadanos, un problema puede unir a los ciudadanos, pero ¿Por qué no consigue lo mismo con los políticos? 

No hay comentarios:

Publicar un comentario